Las instalaciones públicas de lavado de manos dan la oportunidad de hacer observaciones o controles puntuales mientras nos mantenemos a una distancia segura de los demás (a 1 metro como mínimo o lo que indiquen las directrices nacionales). Según los recursos disponibles para el monitoreo, se podría recurrir a las siguientes opciones:
Observaciones estructuradas en instalaciones públicas de lavado de manos
Se sitúa a una persona en la estación de lavado de manos durante todo el día o durante períodos específicos del día para que registre los casos en que las personas se lavan las manos y si usan jabón. Esta persona podría ser un miembro del personal de monitoreo y evaluación de su organización que se dedique exclusivamente a esta tarea o un monitoreador del lavado de manos proveniente de la comunidad local que también esté a cargo de reponer el agua y el jabón en la estación. En este último caso, considere remunerar a esta persona por su tiempo y brindarle capacitación sobre el método de observación. Quizás también deba recargarle crédito en su teléfono para que pueda informar por ese medio los resultados de la observación.
Durante la observación en las instalaciones públicas, se debería registrar lo siguiente:
La cantidad de casos de lavado de manos y si cada persona usó agua y jabón para lavarse o solo agua.
La cantidad de casos en que se repone agua o jabón.
La edad (niño/adulto) y el sexo de la persona que usa la estación de lavado de manos o repone los elementos.
Los casos en que una persona intentó lavarse las manos (con jabón) pero no pudo y los motivos observados por lo cual ocurrió eso.
Nótese que las observaciones pueden indicarnos cuántos casos de lavado de manos hubo durante un período determinado, la edad y el sexo de las personas que usaron las instalaciones de lavado de manos y si usaron jabón. Sin embargo, es poco probable que el observador pueda recordar quiénes visitaron las instalaciones más de una vez, por lo cual estas observaciones no indican cuántas personas distintas usaron las instalaciones ni con qué frecuencia. En determinados contextos, quizás sea adecuado trabajar con una persona local que pueda informar si los usuarios pertenecen a la comunidad o no. Recopilar datos observacionales en los mismos momentos a lo largo de un brote epidémico puede ser una forma interesante de ver cómo cambian los hábitos con el tiempo.
Contar con la información sobre la cantidad de visitas a la estación de lavado de manos también es útil cuando se instala una estación de lavado de manos, ya que puede orientar las decisiones relativas a la frecuencia de reposición del agua y el jabón.
Controles puntuales en instalaciones públicas de lavado de manos
Un observador puede visitar las instalaciones de lavado de manos a intervalos regulares (p. ej.: una vez por día en un momento determinado) para registrar si hay agua y jabón para lavarse las manos. Esta persona quizás pueda trabajar con voluntarios de la comunidad para saber con qué frecuencia se repone el agua y el jabón.
Nótese que los controles puntuales solo nos indican si hay agua y jabón para lavarse las manos, es decir: si el entorno favorece el lavado de manos. Este tipo de observación no nos indica cuántas personas usaron las instalaciones ni si se repuso agua y jabón durante el día.
Medición del distanciamiento físico cerca de las instalaciones públicas de lavado de manos
Esta tarea se puede llevar a cabo de diversas formas, según el contexto y las directrices vigentes sobre distanciamiento físico. En cada una de las siguientes acciones sugeridas, quizás se deba definir un espacio físico para monitorear (p. ej.: un radio de 10 metros alrededor de las instalaciones de lavado de manos).
Contar la cantidad de veces que las personas se dan la mano, se abrazan o tienen contacto físico.
Contar la cantidad de veces que se reúnen en grupos de una cierta cantidad de personas. Esta última cantidad se debería basar en las directrices locales (podría ser difícil hacer esto en un lugar público).
Si los "empujoncitos" para mantener el distanciamiento físico (p. ej.: marcas en el piso que indiquen a qué distancia pararse de los demás) están colocados cerca de una estación de lavado de manos, se podría contar con qué frecuencia las personas no siguen esas indicaciones.
Cuestiones éticas relativas a la observación de las prácticas de lavado de manos en ámbitos públicos
Como no es posible obtener el consentimiento informado de todas las personas observadas en las instalaciones, es importante que los observadores no registren nombres ni ninguna otra información que permita identificar a las personas observadas.
Para informar a las personas sobre el monitoreo continuo, una opción podría ser colocar carteles o hacer anuncios públicos por altoparlante, en los que se informe que se está realizando un estudio. Si se les hicieran preguntas, los observadores también podrían explicar que están contando la cantidad de personas que usan las instalaciones de lavado de manos y que no van a registrar ningún dato que permita identificar a dichas personas.
Si se observan conductas que se consideran inseguras (p. ej.: no cumplir con el distanciamiento físico recomendado) durante las observaciones en las casas o en las instalaciones públicas, se recomienda que los recolectores de datos les recuerden a los participantes algunos comportamientos que previenen la propagación de la COVID-19 siguiendo un guion preacordado, una vez finalizadas las observaciones (para que no influya en las observaciones).
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Notas sobre revisión académica
Redactado por: Fiona Majorin y Julie Watson
Revisado por: Deepak Saxena, Katie Greenland, Hans Mosler, Dr Robina Shaheen
Última actualización: 11/06/2020